Sala Cairo o "Voy a pasarmelo bien en mi lata de sardinas"

Llega el sabado noche, despues de una agradable velada en el piso de un amigo y con alguna copa que otra nos dirigimos al centro de Málaga, dirección sala cairo.

Al llegar a la puerta nos encontramos lo que nos temiamos, una cola de unas 30 personas esperando para entrar y 2 porteros estilo "armario empotrado, el gimnasio mi escuela" controlando a la gente.

Pues bien, nos disponemos a esperar para poder entrar, deducimos que costaria dinero, asi que me fuí un momento al cajero (yo y mis despistes), cuando volví descubrí que aquello no se habia movido ni medio centimetro, la cola parada.

Asi que a esperar y esperar, cuando de golpe se crea una cola alternativa, mucho mas rapida que la nuestra, donde curiosamente se encuentran una serie de bellezas femeninas que saludan con alegria a los porteros y entran sin ningun problema, me gustaria tener tetas y ser rubia, pensé yo.

Despues de un tiempo de espera nos ponemos a la cabeza de la cola, uno de los porteros se disculpa diciendo que los de la otra cola tienen "pase", nos ha jodido, yo tambien dejo pasar a esa clase de jacas sin ningun problema hasta mi casa, incluso les enseño mi habitación si me lo piden.

Llega nuestro turno y nos cobran 6 leuros, no esta mal, yo ya me esperaba una clavada de 10 o 15. Entramos y aquello no podia estar mas lleno. Cantidad de gente en un garito un poco mas grande que mi piso. Voy a pedir las copas y me encuentro a la camarera y al camarero ligando entre ellos, yo no sabia si esperar a que se enrollaran o interrumpirlos, pero al ver tanto tonteo parecia que iba para largo, asi que insistí. La camarera me puso las copas aunque se la veia un poco torpe, le tuve que repetir el pedido 5 o 6 veces, una vez mas, si estas buena puedes ser subnormal que puedes trabajar poniendo copas si quieres, se te perdona.

Y asi estuvimos en aquella lata de sardinas, de vez en cuando algun empujón para pasar, porque no habia ni un sitio libre, y yo un poco hasta las pelotas, todo sea dicho.

Lo mejor llegó a las 4:30 de la madrugada, de repente se encienden todas las luces y cesa la música, joder, yo pensaba que esto estaria hasta las 6 de la mañana minimo, pero no, 6 euros por entrar a un puñetero pub lleno de gente y nos cortan nada mas empezar.

Salimos de alli tras la insistencia de uno de los porteros y nos ponemos a buscar garitos, como siempre los 4 que hay con unas colas kilometricas y con un impuesto revolucionario bastante elevado para poder entrar. Asi que tras mucha busqueda, desistimos, como siempre.

Pese a mis criticas pienso que la sala Cairo puede estar muy bien y volveria a ir...... un jueves.

Maldito trabajo.